El autor emigró a Estados Unidos en 1882 y a su vuelta publicó su primera novela, Hambre, de celebridad inmediata. Posteriormente vivió largas etapas en una cabaña en el bosque, donde escribió Pan y La bendición de la tierra; fue galardonado con el premio Nobel en 1920.
Misterios cuenta la historia de Johan Nilsen Nagel, que llega a un pequeño pueblo costero. Nagel participa en una tertulia en la que habla del socialismo, de Tolstoi, de Maupassant… y de Ibsen, al que Nagel elogia. También le atrae la joven Dagny, cuyo pañuelo encuentra en el bosque.
Sin embargo, Nagel no puede evitar su autodestrucción. Bebe el contenido de un frasquito de veneno. Piensa en las cosas por hacer que no hará, entre ellas darse de baja de la subscripción a varios periódicos. Luego intenta vomitar el veneno, pero no puede. ¡Y quiere vivir! El veneno ya no está, un individuo había vaciado el frasco. Ha fracasado. Le han salvado la vida. En un muelle del puerto se tira al agua y desaparece.
Por José María Puig de la Bellacasa.