En 1980, The Sunday Times encargó a lord Snodwon, cuñado de la reina de Inglaterra, un retrato de Wallis Simpson, duquesa de Windsor, que seguía viviendo en París tras la muerte del duque. El texto debía ser redactado por Caroline Blackwood, una escritora de familia aristocrática conocida por sus textos irreverentes. Este libro relata una entrevista frustrada (Blackwood nunca pasó de la puerta de la mansión Windsor) que no es sino la excusa para desentrañar la biografía de Wallis Simpson, su paso de la casi pobreza a la opulencia y el despilfarro más descabellado (viajaba con 250 maletas y doncellas para sus perros) en compañía del ex rey Eduardo VII. Blackwood hilvana el retrato de la jet set tan glamurosa como improductiva en sus visitas a las damas coetáneas de Wallis Simpson, entre ellas la esposa del jefe de los nazis en Gran Bretaña Oswald Mosley, una de las hermanas Mitford. En esta descripción de la alta sociedad británica se combinan las buenas maneras, algo de chismografía y los entresijos de una imparable decadencia.
Por Rosario Fontova.